lunes, 6 de abril de 2015

La ultima carta



Hoy estoy aquí escribiéndote esta carta como ya se me hiso costumbre, para que sepas que te quiero.
Te quería contar lo que me ah pasado desde tu partida, esos ataques de llanto por las noches al oír tu nombre, esas sonrisas que aparecen de la nada al recordar nuestras travesías, como también aparecen esas lagrimas, que intentan aliviar mi dolor.

Pero más que nada quería contarte que esta va a ser mi última carta, que ya entendí que tienes otro amor, que otra ocupa mi lugar, que otro es el motivo de tus llantos, tus desvelos, tus sonrisas, que aunque a mi me duele horrores tu partida, ya no te escribiré mas. Se que se me va a ser difícil dejar de buscarte, de escribirte, que ya es difícil no tener con quien compartir mis alegrías y mis tristezas, pero que ya entendí que no me quieres.

Pero déjame pedirte un favor, no me olvides, recuerda que fui yo quien te tendió la mano cuando mas lo necesitabas, déjame decirte que no estas solo, que si algún día me necesitas a pesar de todo, yo estaré ahí para vos, para ayudarte, a pesar de que no me quieras y que no me hablas, yo siempre voy a estar para escucharte. Porque el amor no es solo momentos lindos, también hay momentos malos y difíciles.

Y en estos meces aprendí que madurar no es cumplir años, ni crecer, sino que es aceptar los errores que uno comete, dejar ir a la persona que amas aunque te duela y superar cada obstáculo que la vida te pone enfrente, y obvio siempre con la cabeza bien en alto. Y por eso ahora te digo que madures, que hagas tu vida lo mejor que puedas y que no te arrepientas de nada, sabes que te quiero y que aunque no te tenga, quiero lo mejor para vos.

Capas que apartándome de vos, me haga daño, pero quien sabe quizás algún día volvamos a estar juntos, o seamos amigos, que mejor que un amor que no pudo ser pero que quizás pueda ser mas adelante, yo no me arrepiento de nada de lo vivido contigo, porque lo que vivimos fue algo mágico, era amor pero nos encontramos demasiado pronto, demasiado chicos, quizás cuando nos demos cuenta de el verdadero significado del amor, nos volvamos a encontrar.

Como dice la canción: "Fue lo mejor del amor, lo que eh vivido contigo"

Pero ahora cada uno eligió un camino, y aunque duela ese camino ya no es juntos, ya no es conmigo, pero recuerda que te quise, te quiero y te querré por siempre.


Adiós.

(Anónimo)

domingo, 5 de abril de 2015

La mujer de cristal


Hoy es un día triste. Hoy por fin he entendido que no me amas, que no soy quien pueda llenar todos los vacíos que hay en tu vida. Sueño con una historia en la que no encajo. Me encuentro fuera de lugar y hasta ahora no quería verlo, pero es así. 


Dices que te sientes atado a un destino que no planeaste. Pero sí lo hiciste, porque te dejaste arrastrar y no hiciste nada para cambiarlo. Te limitaste a ser arrastrado por la inercia de los acontecimientos. Y ahora sólo notas un gran hueco en el alma, que huele a tiempo perdido, que imita a la nostalgia, que sabe a hiel en los labios…


Y es evidente que si alguna vez pude ser yo quien te ayudara a volar, hoy estoy fuera de toda lógica razonable de dar marcha atrás para intentar hacerte feliz. Llegué tarde a tu vida, pero juro que te estuve esperando más de la mitad de la mía.  


Y ahora evitas en tus mensajes cualquier cosa que tenga parecido a la palabra amor. Siempre estuve enamorada de ti, aun sin saber que eras real. Eres el hombre injusto. Pero también eres la persona que me sacó de la rutina de días idénticos y por eso te estoy agradecida. Porque por fin, llegaste a mi vida para demostrarme que no te estuve esperando en vano. Ahora sé que la felicidad en el amor también es posible, aunque cuando llegas si la función se ha acabado, algo se rompe en el interior y suena como un cristal que se estrella contra el suelo. Así me siento yo: feliz por saber de tu existencia y rota por haber llegado tarde.

viernes, 3 de abril de 2015

Mi Gran Amor



Todo comenzó el año 2006, yo pasaba por un muy difícil momento familiar sentía 
que el mundo se me venía abajo por la separación de mis papás, no encontraba sentido a mi vida y lo único que hacía era pasar de fiesta en fiesta con mis amigos teniendo 15 años hasta que un día sin imaginarlo conocí a la persona mas hermosa de este mundo hablando en todos los sentidos. Sin darme cuenta me enamoré profundamente de él, eran sus ojos, sus manos, su forma de ser todo me envolvió rápidamente.

Nos hicimos amigos ya que mágicamente entró al colegio donde yo estudiaba. Un día no aguante mas y le declaré mi amor, a lo que él respondió con simple cariño de amigo y yo quedé muy triste, pensé muchas cosas y decidí dejar mi colegio, le conté que me iba ya que no podía estar cerca de el amándolo.

El caso es que al decirle esto el reaccionó y se dio cuenta de que sentía cosas por mí y me pidió ser la novia. Por supuesto que acepté.

Me hizo inmensamente feliz como nunca antes lo fui. Sus detalles, su cariño, su preocupación por mí y el inmenso mar de cosas bellas que me dio me hacían sentir la mujer mas feliz del mundo. En sus brazos no existía la pena ni los problemas, nos amábamos tanto que ambos pensamos vivir por siempre juntos. Nos juramos amor eterno y nos hicimos muchos proyectos de vida a pesar de ser muy jóvenes.

Yo estaba convencida que estaría con el toda mi vida, pero como suele pasar cuando uno es muy joven cometí muchos errores. Al salir de fiesta con mi mejor amiga (de ese momento) quise vivir experiencias nuevas. Siempre me había preguntado que se sentiría ser infiel, con un poco de trago de más me sentía lo mejor del mundo y muchos chicos se me acercaban ya que era muy atractiva, y sin pensarlo bien me besé con muchos chicos diferentes. Claro, a cada fiesta que asistía tenia una nueva conquista por así decirlo.

Yo me sentía muy mal por esto, pero en el momento de hacerlo no lo pensaba y mi amiga me animaba diciendo que no importaba ya que él nunca se enteraría y que sólo eran besos nada tan terrible.

El amor de mi vida se enteró y la relación cambió. Su trato hacia mí era el mismo, pero yo podía notar su desconfianza y eso no dejaba que fuéramos totalmente felices.

Al tiempo me pidió que termináramos nuestra relación a lo que yo me rehusé, pero ya no había nada que hacer. Él estaba decidido y para remate su vida dio un vuelco inesperado para mí. Se unió a una iglesia y era otra persona. Muchas veces traté de recuperarlo pero no fui lo suficientemente valiente para cambiar mi vida, que era lo que el me pedía.

Yo confiaba tanto en su amor que pensé que volvería a mí y pasó el tiempo y no volvió y yo cada día me hacía mas buena para la fiesta, estaba hundida en una profunda depresión auto destructiva me encerraba a llorar y tomar alcohol todos los días en mi pieza. Luego de eso los chocolates y comida chatarra se hicieron mi vicio. Subí aproximadamente 20 kilos y ya no quise salir ni conocer a nadie y así han ido pasando los años.

Ya tengo 24 y no puedo olvidarle, sueño cada noche con él. Siento sinceramente que él es mi verdadero amor y nunca podré volver a tenerlo, ya que el hizo su vida. Tiene una hija, aunque por lo poco que se de él no se a vuelto a enamorar, o por lo menos eso me han dicho sus hermanos.

Sé que está mal lo que estoy haciendo, pero cada día que pasa siento que mi vida se seca y aunque no es a propósito creo que inconscientemente me dañó para pagar el gran error que cometí al perderle, al engañarlo y engañarme a mi misma sabiendo que él era mi verdadero amor.

No se si algún día podría recuperarlo o si podré volver a enamorarme o aunque sea perdonarme por mi error, pero lo que si tengo claro es que como le prometí un día lo voy a amar hasta el ultimo respiro, hasta mi último momento de vida y si mi error me lleva a no ser nunca mas feliz lo acepto, ya que por pendejadas perdí lo mas hermoso de mi vida.

Te amo y si no es en esta vida será en la otra, pero te voy a esperar y siempre te voy amar.

 (Anónima)